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Vida Saludable y Promoción del Bienestar
Se ha encontrado una mayor presencia del COCE en el dorso de la lengua del lado izquierdo (también
se encuentra en el lado derecho, aunque con menor regularidad) y en piso de boca.
Si pudiéramos dividir de un 100% la etiopatogenia, el estilo de vida sería determinante para la aparición
de esta neoplasia, representando el 50% de la etiopatogenia, en esta se incluyen hábitos tóxicos (alcoholismo,
tabaquismo y consumo de cannabis), hábitos sexuales (relaciones sexuales sin protección y con múltiples
parejas con el aumento en la probabilidad de contagio de VPH) y la presencia de microorganismo y placa
dentobacteriana asociada a la pobre higiene bucal, así como la edad y el género determinan un factor
importante dentro de este porcentaje siendo el rango de edad siendo cada vez más bajo y una predisposición
al género masculino.
El otro 50% se dividiría en partes iguales, 25% en factores ambientales y el restante a cambios genéticos
como en la inmunología de la boca, alteraciones del ADN y la expresión de los oncogenes P-53. Además, se
puede clasificar a los pacientes de acuerdo con el nivel de riesgo que representan (De la Fuente et al., 2014)
(Tabla 2).
Tabla 2.
Nivel de riesgo.
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Nivel de riesgo Características
• Edad de 18-39 años
• No consumen alcohol ni tabaco
Riesgo elevado
• Sin factores de riesgo predisponentes
conocidos
• Edad de más de 40 años sin factores de riesgo
Riesgo alto
• Edad de 18 a 39 años con factores de riesgo
• Edad de más de 40 años con factor de alto
Riesgo muy alto riesgo
• Antecedente de cáncer oral
Fuente: Tomado de De la Fuente Hernández, J., et al. (2014). Aumento de la incidencia de carcinoma oral de células escamosas.
Salud y Ciencia, 20(6), pp. 639.
La historia clínica tiene elementos que ayudan a la identificación de factores de riesgo correspondientes
a las características sociodemográficas y económicas del paciente, lo que resulta de gran utilidad para
establecer los criterios y ubicar al paciente en el nivel de riesgo al que corresponda. Algunas consideraciones
que no se deben pasar por alto al momento de realizar la anamnesis y al realizar la exploración física del
paciente se muestran en la Tabla 3 y Figura 2, respectivamente.