Page 76 - Estrategias y Responsabilidad en un Mundo Interconectado
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Marco teórico

              El concepto de RSU tiene su origen en la responsabilidad social empresarial (RSE) y, aunque

              su valor se gesta a principios del Siglo XX, a partir de los movimientos que se dieron para

              democratizar la universidad, como el Primer Congreso Internacional de Estudiantes Americanos

              de Montevideo en 1908 y la Reforma de Córdoba en 1918 (Bustos e Inciarte, 2012), sería el

              Informe Brundtland en 1987 el que junto con la Declaración Mundial sobre la Educación Superior

              del siglo XXI terminaría sentando las bases para impulsar el Decenio de las Naciones Unidas

              de la Educación para el Desarrollo Sostenible (2005-2014) a través de la cual se pretendía

              movilizar los recursos educativos del mundo para crear un futuro más sostenible y con ello

              aparecería el concepto de RSU (Bustos e Inciarte, 2012).

              Así, en ese contexto, la RSU se entiende como una política de mejora continua de las rutinas

              universitarias hacia el cumplimiento efectivo de su misión social mediante cuatro procesos que

              deben de articularse y reforzarse mutuamente (Pérez y Vallaeys, 2016).Para ello es importante

              reforzar aspectos fundamentales que la RSU que impacten en cada uno de los procesos de la

              universidad que, a decir que para Pérez y Vallaeys, (2016) son: gestión, formación, producción

              y difusión y participación social (p.20).

              Por otro lado, para que las instituciones implementen correctamente este modelo, es

              importante que se informen y ofrezcan soluciones a los universitarios, tomando en cuenta

              la participación de todos sin excepción alguna. Esto implica establecer mejoras continuas en

              el programa para así comunicar y difundir la RSU, de modo que los stakeholders se sientan

              involucrados y partícipes.

              Para la universidad es un modelo que debe ser socialmente responsable y para ello menciona

              Vallaeys (2014), que “el primer paso fundamental es aceptar que la universidad también daña

              a la sociedad ya sea a través de sus prácticas y acciones, aunque esto suene muy raro en la

              actualidad” (p.111). Ya que como se sabe, a pesar de las buenas intenciones, no podemos dar

              respuesta a los impactos positivos para la sociedad sin antes tener un panorama claro de las

              consecuencias de la toma de decisiones. Si bien la universidad debe ser consciente de sus

              impactos también debe de saber que hay opciones para mejorar dentro del ámbito de la RSU.

              Por otro lado, de acuerdo con Jiménez (2002), la RSU es definida como:






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