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Vida Saludable y Promoción del Bienestar
Muchas veces el envejecimiento se ha calificado como un proceso negativo, sin embargo, las personas
mayores viven cada día más este proceso como algo enriquecedor. Cada vez están más conectados y se
integran de forma activa en la sociedad digital, las apps digitales en materia de salud tienen el potencial de
ayudar a abordar problemas como el control de enfermedades, la distancia geográfica y el acceso a servicios
de salud. El contar con propuestas de diseño para este tipo de herramientas digitales basado en evidencia y
en las necesidades de los usuarios es el primer eslabón para la implementación de la e-salud.
Las aplicaciones digitales funcionan como una herramienta que podría llevar a una mejora en la
vida de las personas mayores. Este grupo poblacional se ha introducido de manera gradual en el mundo
tecnológico y diseñar apps digitales que contribuyan a su estado de salud es una gran estrategia. Tan solo
en 2017, la población a partir de los 55 años representó un 36% de todos los usuarios activos en internet
(INGER, 2018).
Otros datos indican que las personas mayores poseen una gran disposición para participar en
actividades sociales, seguir formándose, compartir sus experiencias, cuidar de otras personas y ser activos
en su contexto social mediante el uso de las tecnologías digitales (González et al., 2017). A pesar de ello, se 127
enfrentan a brechas tecnológicas e intergeneracionales que limitan su participación en el escenario digital.
Por este motivo, resulta imprescindible acercar los recursos tecnológicos a este segmento creciente de la
población. En un primer paso, es importante conocer cuáles son sus necesidades, expectativas y preferencias,
respecto al papel de la tecnología y la utilidad que podrían tener en su vida cotidiana. En consecuencia, será
posible diseñar las estrategias que involucren el uso de la tecnología mediante aplicaciones digitales que se
adapten a sus estilos de vida e intereses para responder a sus demandas.
Debemos aprovechar el potencial que tienen las aplicaciones móviles para dar respuesta a la situación
de salud de las poblaciones, especialmente el uso de las TIC para apoyar la salud de los adultos mayores
que está comenzando a expandirse. Con el rápido crecimiento de la tecnología digital, paralelo al rápido
envejecimiento de la población, existe una oportunidad invaluable para utilizar las tecnologías de los
teléfonos móviles para ayudar a gestionar la salud de las personas mayores y afectar positivamente en su
bienestar.